miércoles, 4 de marzo de 2009

Nirvana


Paz. Tranquilidad. A veces, una mera utopía, ¿a que sí?

Tras un par de días de auténtico órdago, a la carrera y sin respiro, con el añadido del extravío de la documentación del coche (aprovecho para mandar un saludo a la Policía de Casarrubios), me encontraba en casa en la mañana del domingo pasado al borde de un ataque de nervios: Estado de Caos Transitorio.

Pero como ya he dicho alguna que otra vez en el pasado, los pequeños cambios producen cambios grandes.

Las 13:15 horas. Tres pequeños cambios: la persiana del salón un poco más baja, un vaso de cerveza con limón, y el exquisito "Bubblegum" de Mark Lanegan en el equipo. A la altura del séptimo tema, el maravilloso "Strange Religion", me hallaba en pleno Estado de Paz Permanente. Gracias, Mark...